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21 abril 2014

Haken, montaña de elixir celestial



Haken "Climbing The Mountain"  Tour 2014- Sala 2 de Apolo, Barcelona   - 11-abril-2014.

Formada en Londres en el año 2007, Haken era una banda de metal progresivo en sus comienzos. Sus dos primeros trabajos, los conceptuales "Aquarius" y "Visions", son de altísima calidad. Allí se pueden encontrar influencias directas de las bandas que inspiraron su creatividad, aunque ya se detectaban dentro de su estilo elementos muy interesantes que alcanzan una evolución notable en su último trabajo.  Haken tiene el honor de haber sido consagrada la mejor banda progresiva de 2013 gracias a  "The Mountain". Esta magnífica obra, recibida con excelentes críticas por parte de la prensa especializada, fue elegida como el segundo mejor disco del año en la encuesta realizada por la revista "Prog", superada únicamente por el increíble "The Raven That Refuse To Sing" de Steven Wilson. "The Mountain" es un disco lleno de sorpresas, mucho más progresivo que los dos discos anteriores y en donde incorporan referencias clásicas con un sonido maravillosamente rico que alcanza una furiosa energía que se canaliza casi siempre en una explosión musical magistralmente equilibrada. Este es un álbum que los expertos ya consideran como una obra maestra y merece ser escuchado en su totalidad por aquellos que todavía no lo conocen. Con todos esos antecedentes, Haken llegaba por primera vez a España para presentar su último trabajo con su gira europea "Climbing The Mountain".



El concierto:
Ya sabíamos que veníamos a ver una banda que tiene un repertorio de canciones que normalmente superan los 10 minutos. No había grupo soporte, por lo tanto nos esperaba un set  un poco más largo que el que habitualmente vienen tocando durante esta gira. La pequeña sala 2 de Apolo ya estaba completa cuando el sexteto inglés hizo su ingreso al escenario. A modo de introducción arrancaron con la solemne "The Path", y con "Atlas Stone" comenzó el aluvión musical que comenzamos a disfrutar. En seguida nos dimos cuenta de que estábamos en presencia de una grandiosa banda con músicos técnicamente espectaculares que nos paseaban por diferentes climas y texturas de teclados y guitarras, con intensos y brillantes solos y alucinantes juegos de voces y cambios de ritmo que pasaban del metal al jazz con total naturalidad. "Atlas Stone", mi tema favorito, había transformado este concierto desde su comienzo en una experiencia totalmente alucinante, pero todavía quedaban muchas sorpresas para asimilar. "In Memoriam", seguía con la misma intensidad. El cantante y frontman Ross Jennings, tiene un dominio absoluto del escenario. Su potente voz aguda no tiene un gran caudal pero es muy fuerte y estridente y no deja indiferente a nadie.  Haken es una banda muy compensada en vivo, todos sus integrantes tienen un rol musical importante y participaciones solistas destacadas. En la versión de "Streams", mucho más potente que la del disco, se destacan todos los músicos en general, y es importante remarcar que todos tienen la virtud de lograr que en cada tema encuentran la forma de sonar frescos, justamente donde la complejidad virtuosa llevada al límite es la línea conductora. De todas maneras, cada integrante tiene su momento para lucir sus virtudes como Charlie Griffiths y su brillante solo de guitarra en "Insomnia". Luego el nuevo bajista Conner Green, reemplazante de Thomas Mac Lean, quien dejó a la banda en octubre pasado, inventa un genial solo de bajo formando la melodía de "The Path Unbeaten", creando a la vez el interludio de la obra maestra "Pareidolia", uno de los mejores momentos de toda la noche. Fue un éxtasis vertiginoso a través de su fuerza arrolladora, y nos sorprendieron con una notable demostración de equilibrio instrumental entre lo progresivo sinfónico, lo vocal y el metal. Luego la genial "Cockroach King", tema con aires canterburianos en su máxima expresión (aquí Gentle Giant suena por todas partes) y con ráfagas constantes de inmensa creatividad. A continuación "Falling Back to Earth", otra explosión musical con intervenciones técnicamente espectaculares de todos, especialmente de la guitarra de Charlie Griffiths, la contundente y aplastante base rítmica de bajo y sobre todo del baterista Raymond Hearne con su inmensa variedad de recursos, y el trabajo por demás extraordinario del tecladista mexicano Diego Tejeida. Cerraron la primera parte con "Shapeshifter", que sonó como todas las anteriores, compleja e intelectual, y ante una ovación espectacular la banda se retiró solamente por un par de minutos.
Encore:
Enseguida regresaron para ofrecernos las últimas pinceladas mágicas. "Because Is There", sonaba como un solemne himno a través de los juegos de coros "a capella" de las voces grabadas. El tema es una plegaria, simple pero preciosa. Una maravilla de canción en donde se entrelazan armonías vocales, con dos o tres líneas que trabajan en un contrapunto y fabulosas multipartes armónicas. La recta final del concierto fue un ataque con armas de destrucción masiva a los oídos poco exigentes o con mal gusto...
La primera fue "Visions", es increíble esta canción!  Sinfónica y poderosa, con un desarrollo épico de altísimo vuelo de más de 20 minutos. Con increíbles cambios de ritmo y momentos ambientales, es una de las mejores epopeyas progresivas de todos los tiempos. La segunda, y fuera de programa, fue un regalo que no esperábamos..."Celestial Elixir", es por momentos una delirante polka progresiva que por momentos no parecen tomarse en serio, pero que por su riqueza compositiva se transforma en un estremecedor viaje de ida y vuelta al más allá. Y de esa manera llegó el final con los aplausos totalmente merecidos por todo lo que nos ofrecieron, mientras los músicos se retiran despedidos por una estruendosa ovación, nosotros quedamos desbordados por todas partes de euforia y emoción.
En palabras de su líder y multi-instrumentista Richard "Hen" Henshall, principal compositor de la banda: "The Mountain es un paso más allá hacia un sonido más moderno. Pienso que los siguientes álbumes seguirán ese camino hacia un sonido más agresivo, guardando los estilos tradicionales y clásicos que siempre hemos tenido". Y esa complejidad es el resultado de variadas secciones ensambladas y asociadas inteligentemente. Como dice Steven Wilson, son ideas floreciendo de la misma fuente musical.
Haken en este momento emerge del underground inglés dejando el estatus de banda de culto para convertirse en una de las bandas más importantes de la actualidad. Rompiendo su propio molde y reinventándose a sí mismos logran un delicado equilibrio entre modernidad y el respeto por el sonido clásico progresivo.

 
                                                      Fernando Gonzalez








13 abril 2014

IQ "The Road of Bones Tour" en Barcelona



IQ "The Road Of Bones" Tour 2014- Sala Music Hall, Barcelona   - 10-abril-2014.

Cuando IQ visitó por última vez Barcelona lo hizo para participar en el festival de Tiana del año 2007, y en líneas generales dieron la sensación de no sonar con la frescura de otras veces. Si bien brindaron un show aceptable, dejaron bastante que desear. Los motivos fueron varios, entre ellos la mala pasada que le jugaron las cervezas a Mike Holmes, el grupo de "hooligans" que acompañó a la banda (que no tuvo mejor idea que molestar a los músicos interrumpiendo el show), y el sonido algo deficiente que tampoco ayudó.
En esta oportunidad la cosa no fue mejor. La presentación del nuevo disco "The Road Of Bones" no superó al show precedente, y estuvo llena de problemas técnicos que afectaron al rendimiento de la banda, los temas nuevos (e inéditos hasta la fecha), hacían de este concierto una apuesta arriesgada ya que nadie los conocía, y si bien continúan en la línea de su último trabajo “Frequency” (2009), sonaron oscuros y con poco vuelo. Como dato interesante tuvimos el privilegio de poder conseguirlo en el concierto, antes de ponerse a la  venta en las disquerías.
El concierto:
Había mucha expectativa entre los fans que llenaron la sala Music Hall, por el nuevo disco, el décimo trabajo de estudio de la banda. Barcelona se convirtió en el primer show del "The Road Of Bones Tour" al suspenderse el concierto de Lisboa. Ser el primero de la gira puede convertirse en algo peligroso, ya que allí saltan a la luz los errores que se solucionan a medida que la banda adquiere rodaje durante las próximas presentaciones. Y así sucedió...
El show comenzó con lo nuevo, pero la frialdad de "From The Outside In" no pudo romper el hielo. A pesar de la muy buena puesta en escena, la banda no sonaba ensamblada y creo que a mi entender les faltaba ensayo, y eran evidentes los problemas técnicos, de sonido y de la voz. Recién con "The Darkest Hour", clásico del disco "Ever" (obra maestra y referente del rock progresivo), se puede decir que la comunión entre la legendaria banda y su ferviente grupo de seguidores comenzó de verdad. Siguieron con otro de los nuevos temas "The Road of Bones", con su ritmo cansino y muy marcado, gana intensidad hacia el final. Luego "No Love Lost" de “Nomzamo” (para muchos su disco maldito). La portada proyectada en la pantalla nos recordaban al hit single “Promises”, tema que fue un éxito mundial. A medida que avanzaba el concierto la calidad del sonido fue de menor a mayor. "Ryker Skies" de “Frequency” de 2009 su último trabajo, sonó muy bien, y parecía que el concierto iba a seguir con total normalidad, pero los problemas en los teclados de Neil Durant impedían su continuidad. Mientras se solucionaba el problema, y entre algunas bromas, Mike Holmes comenzó a tocar los arpegios de "The Last Human Gateway" (con terrible pifiada y risas incluídas), toda la gente cantó ese pequeño fragmento de la suite de su primer disco "Tales From the Lush Attic" del año 1983, y el momento de tensión se transformó en algo muy divertido gracias a esta inesperada sorpresa. Seguidamente Peter Nicholls presentaba al siguiente tema largo como "una mierda de veinte minutos...bueno, no tanto..." Se refería a "Without Walls", una suite compuesta por varias partes que comienza muy suave con piano y sequencer de batería electrónica, luego se desarrolla con una base muy interesante y contundente de Paul Cook en la batería y Tim Esau en el bajo. A continuación un momento muy festejado con los clásicos "The Wake" y "Leap of Faith", otra de sus joyas musicales, con Michael Holmes, brillante con los arreglos y emblemáticos solos de guitarra. "Until the End", otro de los temas nuevos de carácter épico con la misma fórmula del anterior, y el cierre con "The Seventh House" la gran suite del álbum del mismo nombre.
Para el único bis tocaron "Subterranea", el tema central de ese  gran álbum conceptual y moderno, que fue un hito en su excepcional carrera musical. Y para finalizar el concierto,  Peter Nicholls terminó la canción al grito de "Olé!", como lo hizo aquella vez en Tiana como un homenaje a esta tierra.


                                                   Fernando Gonzalez