.

.

08 febrero 2009

Tiana Prog Fest 2007





Festival de Tiana 2007
Pure Reason Revolution, Magenta, I.Q.

Nota publicada en www.mellotronweb.com.ar (Jun.2007) - Argentina.

La lluvia fue el primer protagonista de la tarde, condicionando en parte de lo que es el gran encuentro al aire libre, previo a la sala del teatro, de todos los años en este cálido recinto de Tiana.
En esta edición del festival, como de costumbre, el progama era muy atractivo, se presentaban tres bandas: la nueva sensación del progresivo alternativo Pure Reason Revolution, los ya consolidados Magenta, y los legendarios I.Q., íconos del Neo-prog.

Pure Reason Revolution:
Las encuentas de varias publicaciones de rock progresivo consideraron a P.R.R. como la banda revelación del año 2006, y creo que estaban en lo cierto ya que su notable aparición en la escena musical a través de su disco debut The dark third, fue recibida con excelentes comentarios por parte de la prensa especializada; con estos antecedentes había una gran curiosidad especial por verlos actuar en Tiana.
P.R.R. subió al escenario a las cinco de la tarde, como estaba previsto, a pesar de que la banda había llegado solamente dos horas antes del inicio del festival… y en furgoneta desde Londres!
El comienzo fue a toda distorsión, con dos guitarras, bajo y batería, la ausencia de James Dobson, el tecladista-violinista (dejó definitivamente de tocar en la banda) hizo que durante la actuación se repartieran los samplers entre los integrantes que tocaron prácticamente sin interrupciones. Cada vez que terminaban un tema seguían sonando las secuencias, y además no se veía a ningún músico excepto al baterista, ya que los otros estaban agachados, muy concentrados con sus procesadores de efectos que enganchaban una canción con la siguiente.
Entre tanta intensidad pudimos apreciar versiones más rabiosas con toques electrónicos, y aunque presentaron casi todo el contenido de The dark third, no estuvieron presentes las sutilezas logradas en el estudio tan características del disco, apenas sonaron en Apprentice of the universe.
Temas llenos de matices como The bright ambassadors of morning ganaron en fuerza pero sonaron acelerados y sin la riqueza de las bellas texturas, además el excelente trabajo a tres voces quedó muy tapado por las distorsiones de las guitarras y por el mayor protagonismo de la batería.
Los integrantes de P.R.R. son muy jóvenes, la bajista Clohe Alper se destaca por su buena voz solista y en los coros, el resto de la banda es un conjunto muy compacto y aunque no existe un desarrollo instrumental virtuoso, es el grupo en sí mismo y la propuesta musical lo que los hace una banda interesante.
Presentaron un adelanto del nuevo disco que actualmente se encuentran grabando que se llama Victorious cupid, que fue muy aplaudido.
A Jon Courtney, voz líder y guitarrista le gusta definir su música como “Rock contemporáneo”, y creo que si nos basamos en el show podríamos decir que P.R.R. se encuentra más cerca de las bandas alternativas que de la escena progresiva.
Fue un concierto corto (duró apenas una hora), sumamente enérgico y con algunos pasajes bien logrados con garra y contundencia, pero el sonido sucio, casi grundge, y algunos contratiempos no los ayudaron, por lo que no se pudo apreciar toda la dimensión musical que P.R.R. desarrolla como banda de estudio de grabación.

Magenta:
Algunos dicen que se parecen demasiado a los grupos que inspiran su creatividad: Yes, Renaissance, Mike Oldfield y Genesis, entre otros, que en su discografía hay guiños a todos ellos, y que repiten fórmulas ya establecidas, es cierto, pero Rob Reed ha sabido amalgamarlos con su enorme talento creativo a través de grandes composiciones y con un estilo sinfónico melódico exquisito.
Debo confesar que es una constante en el ambiente progresivo-sinfónico, el prejuicio snobista, de menospreciar a las bandas consideradas “neo-prog”, buscando similitudes estilísticas para no valorar sus trabajos, y Magenta no se escapó… pero luego del tremendo concierto que la banda nos ofreció mucha gente quedó sorprendida por el nivel de su actuación.
Magenta cautivó al público de Tiana por sus elegantes melodías y la altísima calidad de sus arreglos, el carisma de sus integrantes, y por sobre todo, la magia, presente en cada momento.
Dieron comienzo con Arrival, un tema que como dijeron, les encanta tocar en vivo.
Desde su aparición en el escenario, la presencia femenina y angelical de Christina, pies descalzos y una voz increíble, tan expresiva como dulce, pero también poderosa y muy profunda, no dejó indiferente a nadie.
Desde la etérea Heather Findlay de Mostly Autumn que no veíamos un ángel cantar sobre este escenario.
Siguieron con Gluttony, uno de los puntos altos del concierto, en donde se lucen prácticamente todos los integrantes de la banda, ya sea por los cambios de ritmo, juegos de voces (hasta el guitarrista canta una especie de rap fashion), y porque además esta canción tiene todos los ingredientes y un gran desarrollo instrumental.
A continuación llegó el momento de los nuevos temas incluídos en Home, su última obra conceptual: Hurt, Towers of hope, Demons y la espectacular The vissionary se sucedieron en forma de suite fantástica, llevándonos por pasajes mágicos.
Es notable el equilibrio logrado entre los músicos, pero se destaca el guitarrista Chris Frey, que con sus solos majestuosos y punzantes se llevó una ovación en cada intervención.
La calma del piano de Rob Reed, quien adopta un papel secundario dentro de la banda a pesar de ser el líder absoluto, marcó el comienzo de Anger, una suave melodía cantada magistralmente, y creo que para ese momento no había nadie que no se hubiera enamorado de la voz y de la sonrisa de Christina, la gran triunfadora de la noche de Tiana.
Cuando iban a comenzar a tocar I´m alive se rompió la guitarra Martin Rosser, el segundo guitarrista, entonces la banda deja de tocar, y viendo la desesperación de Christina por el imprevisto que con una sonrisa nerviosa trataba de entretener al público, un inspirado Chris Frey salvó la situación improvisando la primera estrofa del tema en forma acústica, hasta que los demás entraron y salieron airosos.
Se nota que los músicos de Magenta disfrutan plenamente tocando en vivo, la música fluye tan natural como su simpatía.
Para terminar hicieron una versión de Pride mucho más potente que la original, con un gran trabajo de Rob Reed en teclados, batiéndose en un divertido duelo instrumental con la primera guitarra, con solos espectaculares, y Christina haciendo participar al público cantando los coros finales.
Toda una fiesta sobre el escenario, y fue el “finale enérgico con tutti” de un concierto magnífico!
Para los bonus tracks solo hicieron un bis, ya que no les dieron más tiempo de actuación, entonces finalizaron con una versión corta pero muy buena de una de sus mejores obras, la épica The white witch.


I.Q.
Luego de un excesivo paréntesis de espera y antes de la actuación de I.Q. se realizó un homenaje a una persona, recientemente fallecida, miembro el staff de la organización de este evento, Xavier Petit, y para ese momento tan intenso estuvo presente Andy Sears, la voz de Twelfth Nigth, cantando con gran sentimiento en el piano Song of Love.
Y llegó el momento esperado por todos, I.Q. en vivo en Tiana.
Una ovación los recibió, y no es para menos, ya son una banda legendaria (más de veinte años de reconocida trayectoria) y uno de los pilares del neo prog.
El set elegido para esta presentación comprendió material de buena parte de su discografía entre la larga lista de temas memorables.
En líneas generales dieron la sensación de no sonar con la frescura de otras veces (pero brindaron un buen show), tal vez fue por causa de un sonido no muy bueno, pero a medida que avanzaba el concierto la calidad del mismo fue de menor a mayor.
El comienzo con Breathtaker, de Subterranea su álbum conceptual, con su marcado ritmo llenó de energía la sala.
It all stops here y Nomzamo nos mostraron la muy buena onda que hay entre ellos, y su excelente nivel instrumental, también reflejado en muchos pasajes a lo largo del show.
La suite Sacred sound, el único tema que presentaron del último gran disco Dark Matter, tuvo una muy buena puesta en escena acompañada con interesantes imágenes proyectadas en pantallas de video.
Frequency siguió a continuación, y luego Subterranea, que sonó algo diferente sin las secuencias electrónicas que la caracterizan, pero con una instrumentación bien acoplada, y tuvo su toque particular en el final con un “olé” gritado “a capella”, un simpático guiño para la gente de estas tierras.
La sofisticación de The seven house, otra suite espectacular que va creciendo en complejidad, logra momentos delicados y de mucha fuerza.
Es notable la armonía y el buen humor reinante entre los músicos, hasta para cuando tienen que empezar de nuevo una introducción fallida, y para destacar, además de las cualidades individuales de los integrantes, el equilibrio que logran entre los pasajes melódicos y los de escaparatismo virtuoso.
La belleza de Leap of faith además de emocionarnos llevó el concierto a su punto álgido con su largo desarrollo instrumental, al que le siguió el ya un clásico, Human Nature de Nomzamo.
Desde el punto de vista individual se destaca el gran trabajo de Martin Orford, siempre generando esas texturas características de fondos cinematográficos, aunque John Jowitt es un bajista impresionante, muy sólido y preciso, además lo pudimos ver en la prueba de sonido coordinando todo, y no se le escapó ni el detalle más insignificante.
Para Mike Holmes, que se bebió una cerveza por canción, cada tema era una magistral demostración de destreza; y Andy Edwards (ex Robert Plant) reemplazante de Paul Cook en la batería, tiene un golpe sólido y contundente.
El cierre con el épico The enemy smacks, mostró una teatralización excelente por parte de Peter Nicholls, con su voz tan particular, y usando una máscara al estilo Genesis ´70, su canto teatralizado hizo revivir grandes momentos a todos los nostálgicos de Peter Gabriel, y reforzó aún más lo oscuro y siniestro del tema, alcanzando el clímax y la ovación del público más intensa para un gran final.
Al regresar, el primer bis fue el clásico Headlong, tema que hizo participar a todo el público cantando y bailando sobre todo en el final de corte celta de la canción (sí señores, el rock progresivo también se puede bailar!).
Y por último Awake and nervous para muchos rozó una situación medio descontrolada, con un par de hooligans pasados de alcohol subidos al escenario, pero también a Holmes el alcohol le jugó una mala pasada, apoyado en una columna hacía reverencias al público con un vaso de cerveza, saludando con el puño en la cabeza, era un show aparte, para algunos fue muy gracioso, para otros directamente patético…tal vez marque el inicio de la nueva era: “el punk sinfónico”, pero al margen de su propio espectáculo no se puede negar su fuerza expresiva, el brillo y la pulcritud de sus solos de guitarra.
Ovación impresionante para un grupo que marcó historia!

Nuevamente el Festival de Tiana nos brindó la posibilidad de compartir y disfrutar de otra edición espectacular con la presencia de un cartel de grupos de primer nivel dentro de la escena progresiva.
Larga vida a Tiana!

                                           Fernando Gonzalez

No hay comentarios:

Publicar un comentario