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07 febrero 2009

Tiana Prog Fest 2004




6º Festival de Tiana Prog-rock, días 8 y 9 de Mayo de 2004,
Teatro Albéniz , Tiana. Barcelona, España.

Unoma, Kayak, La Maschera di Cera, Versus X, Asgard, Amarok, Andy Sears, After Crying.

El festival de Tiana Prog-rock es un evento que se realiza en un pequeño y encantador pueblito llamado Tiana, muy cerca de Barcelona y que siempre cuenta con la participación de bandas sinfónicas y progresivas muy interesantes.
Este espectáculo por su magnitud está considerado entre los cinco mejores festivales de Rock Progresivo del mundo.
Haciendo un poco de historia, han pasado por aquí en ediciones anteriores importantes grupos:
1999. Colin Bass, Quidam y Galahad.
2000. Minimun Vital, Finisterre, Difícil Equilibrio y Galleon.
2001. Pallas, The Watch y Alquilbencil.
2002. Le Orme, Mostly Autumn y Asgard.
2003. Atila, Consorcio Aqua Potabile, Dr No, The Knife y Syd Barretina.
Y esta vez en su sexta edición, el programa era más que interesante, por la variedad de estilos y países: Unoma, Kayak, La Maschera di Cera, Versus X, Asgard, Amarok, Andy Sears, y los geniales After Crying.
Unas quinientas personas estuvieron disfrutando de esta propuesta durante ese fin de semana.
Todo comenzó el día viernes por la tarde, abriendo el festival la joven banda de Barcelona Unoma, estos catalanes hicieron un corto set con su estilo progresivo clásico. Si bien sonaron un poco tímidos, su propuesta fue interesante, sobre todo en los climas intensos de las partes instrumentales.
La legendaria banda holandesa Kayak ( que a lo largo de su historia sufrió varias reestructuraciones) siguió a continuación, sonando muy A.O.R., muy típico de los años ochenta, presentaron temas de su último disco en vivo “Merlín-Bard of the unssen”.
Se destacaron en las partes instrumentales y en las armonías vocales (realmente impresionantes). Kayak cuenta con tres cantantes de primer nivel, pero lo mejor sin duda es Tom Scherpenzel cuando se luce con sus intervenciones de teclados.
Entre los temas se destacaron las versiones de “Mammoth”, “Ruthless queen” y el tema del final “Winning ways”.
Como dato curioso, que no fue precisamente de lo mejor, cuando en algunas canciones se enfrentaban a dúo los cantantes al mejor estilo Meat Loaf …
Fue una correcta actuación pero que no alcanzó el vuelo de otros participantes del festival.
Siguió a continuación el grupo más esperado del primer día: los italianos “La Máschera de Cera”.
El embrión de esta banda se gestó parcialmente en 1991 de la mano del músico italiano Fabio Zuffanti, bajista de Finisterre, pero que se materializó definitivamente en el año 2001 cuando decidió formar un grupo para recrear la gloriosa tradición del rock progresivo italiano de los setenta.
Desde su arrivo al escenario La Máschera sorprendió con su imagen, rostros pintados (al estilo Osanna) y mucha actitud escénica, sobre todo por el cantante Alessandro Corvaglia y el flautista Andrea Movetti.
Hicieron un recorrido por sus dos únicos discos editados, a través de una actuación sorprendente, con una propuesta arriesgada, entre lo progresivo y lo psicodélico, sonido duro y oscuro, expresivo y emocionante.
Con el grupo italiano finalizó el primer día del festival.

El día sábado iba a ser una maratón de grupos, comenzando desde la tarde con la excelente banda neo progresiva alemana Versus X.
Su set fue un despliegue de talento por las composiciones, arreglos elaborados y un profundo bagaje musical, y aunque las limitaciones del cantante Arne Shäfer se notan en vivo, sale airoso por sus dotes como guitarrista y líder. Además la ductilidad de la banda le permite edificar pasajes de excelentísimo nivel musical.
También el tecladista Ekkehard Nahm nos deleitó con sus intervenciones de muy buen gusto.
Versus X sonó muy compacto y se pudo disfrutar de las sutilezas clásicas y de las complejidades musicales que nos ofrecieron.
A continuación Asgard, también alemanes, hicieron un show mucho más fuerte, y aunque esta vez incorporaron a su música elementos celtas, por momentos sonaron muy heavy.
Este grupo presentó nuevo cantante pero musicalmente agobió un poco, no sonó tan bien como su predecesor y para colmo de males por un desperfecto eléctrico tuvieron que parar de tocar en el medio de su actuación, situación que fue resuelta por un largo solo de batería hasta que se arregló el problema técnico y pudieron seguir tocando aunque un poco bajoneados, pero se pudo observar que la gente del público salía de la sala para aprovechar a sentarse en el agradable patio del recinto, para tomar algo y conversar, mientras Quique, un músico catalán, cantaba acompañado por su guitarra versiones acústicas de rock progresivo.
Y entre los stands de venta en la entrada a la sala se pudieron ver a algunos leyendo el ejemplar número uno de la edición europea de la revista Mellotrón (equivalente al número 31 de la edición argentina).
Andy Sears, quien en un principio iba a tocar solo con su piano para revivir acústicamente los temas de su ex banda Twelfth Night, subió al escenario acompañado por una jovecísima banda local llamada The Knife, se mostró con gran simpatía y hablando todo el tiempo en español (está radicado en Madrid).
Juntos sonaron muy bien como si hubieran tocado desde toda la vida. Además Andy posee un dominio de la escena notable, es un showman. Dedicó un tema a su amigo fallecido Geoff Man, y también habló sobre la necesidad de paz y tolerancia en el mundo actual.
Su actuación fue un poco corta, solamente hizo cinco temas, que fueron los siguientes:
“This city”, “Love song”, “ Lost new day” y “Art and illusion” , todos de “Twelfth Nigth”,
finalizando con una buena versión del clásico “Confortably numb” de Pink Floyd.
Cabe aclarar The Knife es una banda que hace covers de grupos progresivos).
Un momento alto del festival de Tiana fue la presentación de Amarok, (lobo en lengua esquimal). No confundir con la excelente banda sinfónica polaca también llamada Amarok.
En su currículum cuentan con cinco discos editados y varias presentaciones en festivales, destacándose la del Baja Prog del año pasado en donde tuvieron una excelente opinión por parte de la crítica.
Presentaron parte de su último trabajo “Mujer luna” y algunos temas nuevos todavía no editados.
Esta banda catalana ejecuta una música muy variada, con instrumentos diversos, y que va desde el rock progresivo hasta el ecléctico mestizaje mediterráneo.
El grupo está integrado por músicos de distintas nacionalidades, Marta Segura (voz), Carles Gallego (guitarras), Alan Chehab (bajo), Manel Mayol (flautas), Mireia Sisquele (saxos), Pau Zañartu (baterista chileno), y Robert Santamaría (tecladista venezolano).
Por eso y por las variadísimas influencias su música se enriquece dando como resultado una amalgama de sonidos más que interesante.
Y el plato fuerte llegó al final, desde el Este de Europa, a la 1:30 de la mañana comenzó a sonar la increíble, sorprendente y colosal banda húngara After Crying, que para muchos de los que estábamos allí es la banda más representativa de la escena progresiva actual. Su show nos dejó una cantidad de emociones tan fuertes que todo el mundo rompió sus manos aplaudiendo y ovacionando a estos increíbles músicos.
Y fue un momento especial. Es que la llegada de After Crying al Tiana Prog-rock es significativa no sólo porque confirma la calidad de uno de los grupos más prestigiosos del progresivo, sino porque también jerarquiza el significado cultural de la última edición de este festival.
Tanto talento reunido (la mayoría de los integrantes son músicos activos de la Sinfónica de Budapest) nos provocó durante dos horas una emoción sublime.
Las texturas que After Crying va creando durante la ejecución de sus obras mediante sus instrumentos, tanto de los que provienen del rock como los provenientes de la orquesta sinfónica, nos llevan al éxtasis. Es la unión perfecta entre lo clásico y lo vanguardista.
Peter Pejtsik es sin duda un genio tocando cello, y no es menos tocando el bajo, Ferenc Torma es un guitarrista impresionante, Balazs Winkler un maestro del piano y la trompeta, y Gabor Egervari en flautas desde la consola de sonido con su voz en off haciendo las presentaciones, son los que más se destacaron, aunque los demás miembros no se quedan atrás.
El repertorio elegido se centró en su último disco “Show”, pero no olvidando los temas clásicos como los su gran obra “De profundis” y también un extenso meddley final incluyendo fragmentos de su tributo a Keith Emerson.
En After Crying todo es estremecedor, por momentos uno cree que está viendo a King Crimson acompañado de una orquesta sinfónica y una banda de jazz , y a su vez, la riqueza técnica y expresiva en la ejecución de los temas de una manera fuerte o sutil, a veces folk, y pasando por una delicada belleza a una fuerza arrolladora.
Apoteosis final, broche de oro para terminar y no olvidar.
Deseamos que este tipo de festivales con tan variados estilos, fruto de la combinación de buena música con ideas muy diferentes se repitan con más asiduidad.


                                              Fernando Gonzalez

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